Evangelista de datos
Un verdadero reto: las pérdidas de agua
Gestionar una red de distribución de agua con fugas es un verdadero reto. Las pérdidas de agua suponen no sólo un aumento del coste de la actividad empresarial, sino también la pérdida de un recurso tan crítico como el agua.
El paso del tiempo provoca la aparición de nuevas fugas y, con ello, un aumento de los costes, lo que reduce aún más los beneficios y, con ello, aumentan los presupuestos de mantenimiento y reparación de la red. Estos presupuestos son aún más difíciles de estimar si realizamos un mantenimiento reactivo (sustituir una tubería cuando se produce una fuga en lugar de sustituirla antes de que se rompa). Sólo subestimar estos costes puede afectar gravemente a la empresa y a nuestro planeta.
El mantenimiento predictivo puede mejorar la estimación. Para ello, se priorizan aquellos activos con mayor probabilidad de fuga. Este proceso requiere un trabajo adicional a la hora de realizar esta estimación, que además puede conllevar mayores costes si no seleccionamos adecuadamente. Esta predicción puede ser muy complicada de realizar en la práctica, ya que está condicionada por muchos factores que afectan a la probabilidad de fuga.
La era de los datos
La antigua gestión manual de los activos, con pocos registros digitales y rotación de personal, hace que actualmente se pierdan muchos conocimientos sobre la red en la memoria de los antiguos empleados al no quedar registrados. Hay que añadir los frecuentes errores humanos en el registro manual de activos.
Estos datos que antes no se explotaban ahora pueden transformarse en información útil. Estamos en la era de los datos; cualquier actividad que realicemos genera información que puede beneficiar significativamente al negocio. Muchos se preguntarán hasta qué punto es útil tener mi red de activos en formato digitalizado.
Disponer de mi red de activos en formato digital optimiza esta priorización mediante diversas técnicas y algoritmos. A través de esta estimación, podemos anticipar roturas y fugas en nuestra red, lo que nos permite planificar las actividades de mantenimiento, reduciendo así nuestros costes. Podemos mejorar cada vez más los resultados mediante inteligencia artificial (IA) que aprende las peculiaridades de nuestra red y aquellas características que generan una mayor probabilidad de fuga.
Aunque existen múltiples soluciones y sensores que ayudan a detectar fugas en nuestra red, debemos distinguir que, aunque son beneficiosos, corresponden a un mantenimiento correctivo. El consiguiente aumento de costes no nos permite planificar nuestras actividades de mantenimiento.
¿Cómo puede Fracta ayudarnos a ahorrar agua y a gestionar nuestra red de agua de forma más eficiente?
FractaPor otro lado, ofrece una solución digital a través de IA que nos permite anticiparnos a las fugas y nos ayuda a detectarlas sin necesidad de instalar ningún equipo adicional, realizando una limpieza y corrección de los datos. Con Fracta, las predicciones de fugas en nuestra red de distribución de agua están disponibles en menos de 45 días.
Esta tecnología predice la probabilidad de fallo en diferentes periodos para cada activo de nuestra red utilizando más de 150 factores con poder predictivo. Esta estimación facilita la priorización de las tareas de mantenimiento y la detección de fugas existentes.
También se generan escenarios de costes para cada tubería, teniendo en cuenta sus características y las instalaciones críticas a las que da servicio, generando una estimación del coste de la avería. Esta probabilidad de rotura multiplicada por el coste puede utilizarse como métrica para priorizar los costes de mantenimiento de nuestras empresas. De este modo, se reducen las pérdidas de agua y los costes de mantenimiento al priorizar correctamente los activos.
