Reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y beneficios de la eficiencia energética

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Pablo González

Especialista PM

Lucha contra el cambio climático

La lucha contra el cambio climático es un tema candente y complicado. Ya se ha demostrado que la huella medioambiental y las emisiones de gases están directamente relacionadas con la calidad de vida de las personas. No es lo mismo vivir en una mansión que en un piso o comer carne de vacuno todos los días que basar tu dieta en alubias y verduras. Sin embargo (y afortunadamente), la tendencia de la calidad de vida es ascendente; cada año alcanzamos mínimos históricos con el número de personas que viven en la pobreza extrema, personas que carecen de acceso al agua o analfabetos. Sin embargo, esta relación entre consumo y mejora del nivel de vida debe invertirse, mejorando las condiciones sin aumentar el coste.

Ya se están desarrollando varias soluciones: pasar de los combustibles fósiles más contaminantes a las energías renovables, desarrollar tecnologías verdes como la captura y almacenamiento de carbono, y utilizar los residuos como fuente de energía. Sin embargo, en mi opinión, la más sencilla, rápida y barata de aplicar es mejorar la eficiencia energética.

Puede ir desde el cambio a combustibles más eficientes (del carbón al biogás) o la mejora de las infraestructuras (sustitución de calderas convencionales) hasta la mejora de las prácticas (optimización del comportamiento de los transportistas para mejorar el consumo de los camiones). El mundo de la eficiencia es muy amplio y sus soluciones muy diversas.

Aunque son mis favoritos, mejoras medioambientales y reducción de emisiones no son las únicas ventajas de este tipo de soluciones. Las empresas se inclinan cada vez más por desarrollar proyectos con este tipo de objetivos en mente. Consumir menos significa no sólo emitir menos, sino también reducir los costes de producción y hacer que la empresa sea más competitiva. Los plazos de amortización son cortos y los beneficios a largo plazo son cuantificables.

Algunas de las acciones de Kurita
  • Energía geotérmica es una fuente de energía renovable con bajas emisiones y gran potencial, pero las condiciones son muy duras y la salmuera genera muchos problemas de eficiencia en la planta. Nos encontramos con un caso con un problema de incrustaciones en el que el cliente veía cómo las incrustaciones bajaban el rendimiento de la planta en más de 2 MW sin poder hacer nada. Después de que nuestro equipo trabajara aplicando un KurithermTM producto, se solucionó el problema, aumentando la producción de energía en más de 6 mil MWh en 8 meses. Si esta cantidad de energía procediera de un combustible como el carbón, se producirían unos 6 millones de toneladas métricas de CO2 se habrían emitido más que desde esta planta.
  • Las industrias figuran entre los mayores emisores de GEI debido a su elevado consumo de energía y a sus métodos de producción. El caso de este ejemplo es un papelera con un consumo de 60.000 kWh/día. Gracias a la actuación de nuestros colegas aplicando Tecnología Kurita DropWisey, se ha logrado una reducción del consumo de energía de 7%. Esto equivale a evitar la emisión de 520 toneladas de CO2 sin reducir la producción.

Los gobiernos constituyen otra fuente de apoyo para este tipo de iniciativas. Tienen la obligación de legislar y apoyar medidas que mejorar el ahorro y reducir el consumo. Un ejemplo es el caso de los certificados blancos, planes en los que los pequeños consumidores pueden canjear sus ahorros en Wh como si fueran fichas y venderlos a los grandes consumidores que no alcanzan los ahorros que se les imponen como principales contaminadores. Esto permite abaratar los costes de los proyectos y reducir el tiempo de amortización de los mismos, lo que hace más atractiva la realización de este tipo de acciones.

En conclusión, la eficiencia energética no sólo es esencial para reducir las emisiones de GEI y mitigar el cambio climático, sino que también ofrece beneficios económicos tangibles y promueve la sostenibilidad medioambiental. El compromiso con la eficiencia energética refuerza la resistencia de las empresas a los retos climáticos y económicos e impulsa la transición hacia una economía baja en carbono y más sostenible para las generaciones futuras.

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